mercredi 21 septembre 2011

esclavitud perpetua....los tiempos nunca cambian para el pobre

No es posible mirar la sociedad chilena desde un solo punto de vista, porque toda observación resultaría incompleta. Es culpa común que existen dos clases sociales opuestas, y como si esto fuera poco, todavía tenemos una clase intermedia que complica más este mecanismo social de los pueblos". A partir de ese punto de vista -el del proletariado-, desarrolla su pensamiento.
"Estamos convencidos desde hace tiempo -sostiene- que no tenemos nada que ver con la fecha llamada el aniversario de la Independencia nacional. Creemos necesario decir al pueblo el verdadero significado de esa fecha, que desde nuestro punto de vista, tiene solamente sentido para la burguesía, siendo que son ellos los que se levantaron contra la corona de España y son ellos los que conquistaron esta patria para aprovechar todas las ventajas que les dio la Independencia... Es por esto que no encontramos razones por las cuales la clase popular pudiera sentirse feliz de este día... La fecha gloriosa de la emancipación del pueblo todavía no ha sonado, las clases populares viven aún en la esclavitud, encadenadas al orden económico por el salario y al orden político por el fraude... Un pueblo que vive así, sometido a los caprichos de una sociedad injusta, inmoral y organizada de manera criminal, ¿cómo puede celebrar el 18 de septiembre? Imposible. El pueblo debe abstenerse de participar en esta fiesta, debe negar su participación en las fiestas donde los verdugos y los tiranos celebran la independencia de la clase burguesa que no es ninguna independencia del pueblo, ni como individuo ni como colectividad".
No niega Recabarren lo evidente, pero descubre sus causas. "Hay progresos evidentes en el siglo transcurrido, ello no puede negarse. Pero esos progresos corresponden a la acción de toda la colectividad y en mayor proporción, si se quiere, de la clase proletaria, que es el único agente de producción, de creación de las ideas y de los pensamientos. Pero esos progresos ostensibles, son precisamente la causa de la miseria proletaria. El progreso está construido, pues, con cuotas de la miseria. De todos los progresos de que el país se ha beneficiado, al proletariado no le ha correspondido sino contribuir a él, pero para que lo gocen sus adversarios".
Luis Emilio Recabarren 1910.